Los argumentos de la industria musical española son indefendibles porque hay ejemplos de países en que la libertad en la red ha convertido su industria musical en una de las más florecientes del mundo, caso de Suecia.
Esto lo explica muy bien Rasmus Fleischer en su Manifiesto posdigital, del que escribí en Nodos Ele hace unas semanas. Todo el movimiento pirata sueco está en la base de este florecimiento cultural en un país tan pequeño: la música es la tercera industria importadora de Suecia. Ese es el modelo de negocio y no el del control y la censura, que lleva al páramo subvencionado.
Gracias a The Pirate Bay y sus ramificaciones tenemos una escena musical sueca que solo está por debajo de la de EEUU y Gran Bretaña. De entre los cientos de blogs que se encargan de difundirla, ofrecerla y compartirla, recomiendo Swedesplease.
La cultura se alimenta de libertad, de crear y de compartir. La música ha abierto camino, la escuela vendrá después. Como dice Borja Prieto;
Dentro de unos años habrá empresas que cobren por promocionar música, libros o películas en las redes P2P o en sitios como YouTube o Last.fm. Los mismos que ahora se quejan de que sus obras se difundan libremente pagarán por ello. Y es que eso que llaman piratería no es más que la publicidad del siglo XXI.
Los argumentos de la industria musical española son indefendibles porque hay ejemplos de países en que la libertad en la red ha convertido su industria musical en una de las más florecientes del mundo, caso de Suecia.
Esto lo explica muy bien Rasmus Fleischer en su Manifiesto posdigital, del que escribí en Nodos Ele hace unas semanas. Todo el movimiento pirata sueco está en la base de este florecimiento cultural en un país tan pequeño: la música es la tercera industria importadora de Suecia. Ese es el modelo de negocio y no el del control y la censura, que lleva al páramo subvencionado.
Gracias a The Pirate Bay y sus ramificaciones tenemos una escena musical sueca que solo está por debajo de la de EEUU y Gran Bretaña. De entre los cientos de blogs que se encargan de difundirla, ofrecerla y compartirla, recomiendo Swedesplease.
La cultura se alimenta de libertad, de crear y de compartir. La música ha abierto camino, la escuela vendrá después. Como dice Borja Prieto;
Por cierto, George Siemens se ha hecho eco de lo que pasa en España, y lo ha entendido muy bien: