Archivo de la categoría: edupop

De individuo sospechoso a ensayista celebrado. El «pirata» Rasmus Fleischer gana el Premio Clío 2013

secondColumn

Siempre me ha interesado la obra del sueco Rasmus Fleischer (Halmstad, 1978). En este mismo blog he escrito de su Manifiesto posdigital (Det posdigitala manifestet, 2009), un ensayo soberbio en el que explica cómo la piratería ha sido fundamental a la hora de convertir a un pequeño país como Suecia en la tercera potencia musical del planeta.

Un indicio de cómo los tiempos están cambiando, en el sentido que hemos venido defendiendo en Nodos Ele, lo encontramos en la concesión esta semana del prestigioso Cliopris (Premio Clío de Historia) a su obra Musikens politiska ekonomi («Economía política de la música». Estocolmo, Ink bokförlag, 2012), en la que establece una comparación entre el cambio tecnológico que tuvo lugar a principios del siglo XX y la época actual. Este es el razonamiento del jurado:

musikens_politiska_ekonomiConcedemos el Cliopriset 2013 Rasmus Fleischer por su innovador y completo libro sobre economía política de la música. El autor combina con habilidad los aspectos económicos, estéticos, jurídicos y técnológicos de la escena musical del siglo XX, situando en una perspectiva histórico-crítica temas fundamentales de la vida musical de hoy. El estudio contribuye en gran medida a ilustrar el cambio histórico de la relación entre los medios de comunicación, la cultura y la economía y, por tanto, ensancha la capacidad de comprensión del mundo contemporáneo.

El cambio cultural que supuso a finales del siglo XIX la posibilidad de reproducir música mediante altavoces y sistemas fonográficos puede equipararse al que se ha abierto ante nosotros gracias a la capacidad de intercambiar archivos digitales. Los músicos «en vivo» de la época forzaron leyes en toda Europa por las que las salas de cine que usaran gramófonos en vez de pianistas, por ejemplo, tenían que pagar un canon que iba a sus bolsillos, en concepto de «compensación». Este dinero era gestionado por asociaciones al efecto (les suena, ¿verdad?).

Sólo he leído resúmenes del libro, pero una cosa que me fascina es la capacidad de Rasmus Fleischer para unir su trabajo teórico y su propia vida. El fue uno de los fundadores del Piratbyrån (2003), y participó activamente en los debates sobre el intercambio de archivos en Suecia, patria de Spotify (la empresa que ha salvado de la quiebra a la industria musical) y The Pirate Bay. De hecho, aparece en algunas escenas de la película sobre el jucio a los piratas suecos: TPB AFK: The Pirate Bay Away From Keyboard (2013), de la que ya hemos hablado y que es un documental que se ve de un tirón, y del que se aprende mucho.

Rasmus Fleischer ha pasado de individuo sospechoso a reconocido pionero de la nueva cultura posdigital. Nada nuevo. La historia de siempre. Gracias a gente como él la cultura sigue viva, que es como debe estar si se la deja en paz y en libertad. En 2009 escribí: «Lo que ha servido para la música, debería servir para el resto de los campos culturales, muy especialmente en el terreno educativo». En 2013 se empiezan a ver los frutos de este cambio de paradigma.

La mejor canción en español sobre internet

En Nodos Ele le hemos dado siempre mucha importancia al componente pop(ular) de la tecnología. David Vidal y yo llegamos a lanzar un Manifiesto Edupop, en respuesta al Manifiesto Edupunk, de Lamb y compañía.

Aquí ha habido bastante debate sobre los aspectos populares del posdigitalismo, a partir de diferentes posiciones. Se ha hablado de música pop, obviamente. Hemos posteado sobre Astrud, hemos discutido sobre Hidrogenesse, hemos analizado a Steven Johnson hasta decir basta, hemos regalado cedés cuando íbamos a dar alguna charla –tenemos una bandcamp con algunas de las canciones…

En definitiva, hemos hecho decenas de acciones en torno a la dimensión popular de las tecnologías digitales y el aprendizaje. Llevamos desde 2007 dando la matraca, así que resumirlo nos llevaría horas.

Pero hoy es viernes, así que propongo que hagamos una lista con las mejores canciones sobre internet (o las peores) que se hayan hecho en español. Yo, desde luego, lo tengo claro en cuanto a la mejor:

De Nebrija a Ola k ase. Salamanca se lanza a las Humanidades Digitales en clave ELE

482690_504522986277274_1494441676_n

Parece que va tomando cuerpo el MediaLab USAL creado por el Servicio de Innovación y Producción Digital de la Universidad de Salamanca. Eso está muy bien, porque se adivina mucho talento y ganas de hacer cosas.

Como es natural, la línea de investigación que más me interesa es Hablando Eñe (HÑ), que definen así:

Esta línea de trabajo se centra en la difusión de la cultura y el idioma del español.

Las actividades que se ponen en marcha desde esta área están orientadas a recorrer el español en todas sus vertientes: acentos, evolución del idioma, geografía de la lengua, literatura en castellano, hispanohablantes del mundo, narrativa, autores, impacto de redes sociales en el uso del idioma…

Supongo que Hablando Eñe parte de la sinergia con el ELElab de la misma Universidad, una iniciativa que destaca claramente en el incipiente panorama de las Humanidades Digitales en España; aunque demasiado orientada hacia la creación de materiales, para mi gusto. Si de algo estamos servidos en el mundo ELE -tan cutre en tantas cosas- es de materiales de calidad que generan editoriales privadas. Veremos.

Creo que el primer proyecto HÑ fue la instalación de Damià Jordà sobre acentos de la lengua Proyecto Oral:

Ahora se descuelgan por fin con una mesa redonda/seminario: Ola k ase. El español en internet (14 de marzo) en el que estará gente que viene del ELElab: Daniel Escandell, Sheila Lucas y Alvaro Recio.

Va siendo hora de que la gente joven que se dedica a la Enseñanza del Español como Lengua Extranjera entre con fuerza en un campo que necesita renovarse continuamente.

El nacimiento de Twitter y Grupo Nodos Ele

[Este fue uno de los logos que creamos en julio de 2007 para Nodos Ele. Al final, lo descartamos porque daba una imagen demasiado unidireccional del Grupo]

El Grupo Nodos Ele nació en Twitter en el verano de 2007. Francisco H., Victoria C, Emilia C., David V. y yo mismo, decidimos fundarlo para explorar las posibilidades de lo digital en el aprendizaje de lenguas.

No pienso contar batallitas. Desde entonces han pasado muchos negronis, que darían para estar horas hablando. Recuerdo que en aquellos meses la gente se tomaba a broma Twitter, que acababa de nacer en marzo.

Nosotros mismos hacíamos bromas sobre la forma en que lo estábamos usando para conectarnos, aunque me atrevería a decir que éramos de los pocos que teníamos claro que había venido para revolucionar la forma en que nos comunicamos.

Me he acordado de esto al ver este fragmento de un telediario de aquel momento. Es de la CBS. El final es glorioso, con los periodistas riéndose y diciendo que Twitter no sirve para nada y que no tiene futuro.

Cráneos «previlegiados»:

On/Off Un Dígito Binario Dudoso (2012) Hidrogenesse (y II)

Love lettersA mí también me gusta Hidrogenesse, posiblemente porque soy de una generación que experimentó con ciertas formas de teatro grotowskiano, al tiempo que crecía a golpe(s) de Deutsch Amerikanische Freundschaft, italodisco y cosas raras.

Sin embargo, Un bit binario dudoso se merece un off como una catedral, ya que se trata de un proyecto fallido, se ponga David Vidal como se ponga.

En un mundo fragmentado los mensajes se revelan y esconden en forma de escolios, que ocupan los márgenes del discurso. Olvidad las bonitas melodías y las reflexiones campanudas, olvidad las trabazones caramelizadas y la logorrea de los puntos y seguido. Son cantos de sirena en papel de celofán.

No queda rastro en este disco de las apostillas laterales de caballos y ponies, no hay disputaciones entre PCs y MACs, no hay márgenes ni gritos ni medias verdades.

Sólo así se comprenden las innecesarias addendas del video sobre la historia de la computación. Cuando desde América nos llegan los himnos de Matilda, Capullo o Dixybait, que en su simplicidad cortante de cuchillo en el agua, nos revelan el envés de la trama, todo esos bits quedan un poco Corte Inglés («¿se lo envuelvo para regalo?»).

Pues mire, no. Me voy a la verbena en busca de unas cuantas certezas. No querían conectivismo, pues tomen dos tazas:

La caída de Hidrogenesse en la moralina se puede resumir en esa actitud viejuna de adoctrinar deleitando, aunque sea sobre unos tacones en forma de tarima, y tras unos bigotes austrohúngaros.

Lo más cercano al último disco de Hidrogenesse es una asamblea de indignados sentados en el iBook al lado de la tienda Mac de la Puerta del Sol, todo ello convertido en fábula en verso por Félix María de Samaniego.

Que vuelva Hidrogenesse a sus inicios, que vuelvan a la calle en ukelele, que no se escondan detrás de una mampara en blanco y negro.

On/Off Un Dígito Binario Dudoso (2012) Hidrogenesse (Parte I)

Love lettersOn/Off sobre el disco de Hidrogenesse «Un Dígito Binario Dudoso», del que Emilio hacía una breve review en este post. En definitiva, un on como una catedral de grande.

Hidrogenesse es un grupo que siempre me ha gustado. Me va ese rollo entre naïf y absurdo, alrededor de temáticas que dejan entrever que hay algo más allá del juego entre tacones y bigotes (hasta hace poco) pasados de moda.

Desde que anunciaron la edición de Un Dígito Binario Dudoso, esperaba con impaciencia poder escuchar los temas, de los que apenas ofrecían algunos adelantos a través de la ya habitual web dedicada al lanzamiento (en la que puedes seguir el desarrollo de la creación del mismo). Además de por las razones habituales, en esta ocasión Hidrogenesse tocaban uno de mis temas favoritos, el de la conciencia, encarnado esta vez en la pregunta ¿Puede pensar una máquina? enunciada por Turing en uno de sus textos clásicos. A pesar de ser un encargo, que bien podía no haber llegado a buen puerto, se nota que las discusiones con Manolo Martínez no han sido pocas.

«Un Dígito Binario Dudoso» es una suerte de viaje a través de la vida del matemático, con parada y fonda en temas que confunden al propio Turing (voz narrativa en Christopher, Captcha Cha-Cha) con una máquina que es capaz de sentir amor (Love letters, que podéis escuchar en el video, un poco más abajo) y reivindicar la historia de su estirpe (Historia del Mundo Contada por las Máquinas).

Para quien no sitúe muy bien este On/Off en un blog como Nodos Ele, sólo recordaros que uno de los puntos más polémicos de la teoría conectivista enlaza directamente con la problemática a la que tuvo que enfrentarse Turing. Si recordáis los principios básicos del Conectivismo, sostienen que el aprendizaje (no el conocimiento) puede residir en dispositivos no humanos, ampliando de esta forma la idea de conciencia humana más allá del propio cerebro… hacia las máquinas. Conectivismo y música pop: sin duda una nueva alineación de los astros.

En definitiva, uno de los discos imprescindibles de 2012, ejemplo también de modelo de negocio y creación en nuestra maltrecha industria musical. Si no lo has escuchado puedes hacerlo gratis en You Tube y Spotify, o comprarlo directamente en la web de Austrohúngaro.

Hidrogenesse resume el libro de Jon Agar sobre Turing y la máquina universal

Bueno, no se trata propiamente de un resumen del clásico de Agar: Turing and the Universal Machine: The Making of the Modern Computer (1997), porque no hablan ni de la navaja suiza ni de otros elementos troncales del libro.

En realidad, «Historia del mundo contada por las computadoras» es un relato fragmentario del desarrollo de la computación desde los inicios de la revolución industrial hasta hoy.

Hidrogenesse siempre han hablado mucho de digitalidad en sus canciones, pero en esta ocasión lo que han sacado ha sido un disco conceptual, dedicado exclusivamente a pensar estos temas: Un dígito binario dudoso. Recital para Alan Turing (Austrohúngaro AH025).

Inglaterra apuesta por las «free schools»


En septiembre se ponen en marcha las 24 primeras «free schools» que el Gobierno inglés pretende que sirvan de modelo para la liberalización progresiva del sistema educativo británico, siguiendo a su manera la reforma del sistema educativo sueco.

La iniciativa se enmarca en el marco del proyecto político-cultural de Cameron: Big Society, es decir, menos Estado/más individuo.

Las «free schools» son independientes de la burocracia estatal, viven de lo que ingresan, forman parte del sistema público educativo, y se gestionan de acuerdo con idearios y currículos propios estipulados por los padres y los profesores que ponen en marcha la escuela. Cualquiera puede montar una, en una tienda o en su casa.

Lo explica Michael Gove, Ministro de Educación: «Las escuelas son de los padres y de los profesores, no del Estado. Las escuelas son espacios de libertad para aprender, no fábricas de adoctrinamiento. El Estado no debe interferir en la educación de los ciudadanos».

http://youtu.be/WF5XQIDQRpQ

La escuela británica opta por la libertad y la retroinnovación (según me gusta llamarla). En mi opinión, estamos ante el comienzo de una educación posdigital, es decir, ante el fin del sistema educativo estandarizado que comienza en el siglo XIX:

http://youtu.be/yMl2q-lfzvE

Confianza, redes sociales y una divagación antropológica

Una de las mejores entradas que he leído últimamente sobre la sociedad posdigital (sus organizaciones e instituciones) es «Trust and Networks» («Confianza y redes»), de Gideon Rosenblatt.

No es el típico mantra del guru profesional, sino una reflexión realista que incide en la línea del conectivismo y el sharismo que defendemos en NodosEle.

Para Rosenblatt, la sociedad posdigital (y sus organizaciones e instituciones) no se estructura en jerarquías sino en conexiones, y en ella no tiene cabida la evaluación externa. Su base es la confianza entre iguales autónomos. Este sería un resumen de los puntos básicos de su reflexión:

  1. Las redes consisten en conexiones voluntarias entre iguales autónomos.
  2. La confianza es la base de una red social, ya que la fortalece, la hace más flexible y eficiente.
  3. Las redes son las conexiones que permiten a los pares trabajar juntos.
  4. En una red no hay control externo. Una «evaluación del desempeño» impuesta destruye la confianza de la red colaborativa.
  5. La relación en la «red» se basa en el «trabajo» en la red. Trabajar es conectarse.
  6. La «confianza» consiste en no tener miedo a ser vulnerable.
  7. El principio básico en una red es el «respeto mutuo». Si hay respeto mutuo, las conexiones surgen de forma natural.
  8. Tenemos que salvaguardar la confianza para garantizar que nadie abusa de la autonomía de los nodos.

No voy a traducir todo el post. Es simplemente perfecto, y no se trata de ninguna especulación teórica. Es la pura realidad. Las cosas funcionan así.

Todo esto me suscita una pregunta de tipo «antropológico». ¿Hasta qué punto una sociedad como la española (sus instituciones y organizaciones también), en la que abunda la picaresca, la falta de cumplimiento de las promesas, el «engaño» a los otros como forma de «ser más listo», la falta de transparencia, el principio de autoridad, las jerarquías y los escalafones, la titulitis, las instancias con póliza y compulsa, la burocracia como forma de impedir la innovación, etc. tiene cabida en el mundo en que ya estamos viviendo?

No es absurdo pensar que si nuestro país no cambia de «mindware», puede perfectamente iniciar una lenta y profunda decadencia en los próximos años.

What does the software?

Esta semana me estoy mudando de despacho, y aprovecho para recordar una ilustración que tengo colgada en el tablón de la oficina, del estupendo ilustrador Hugh MacLeod:

 

software

Y precisamente hoy George Siemens nos recuerda que esto del Conectivismo no tiene nada que ver con la tecnología… A través de Kentaro Toyama lo dice por enésima vez: «Technology is not the answer»

Vayan aplicándose el cuento los de las pizarras digitales.