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Astrud y la comunicación

Este fin de semana he vuelto a escuchar los discos de Astrud y me he dado cuenta de la cantidad de canciones que pueden interpretarse desde un punto de vista comunicativo.

Es fácil encontrar en esas letras una capacidad muy profunda para interpretar lo que pasa en la mente de los seres humanos cuando tratamos de hacernos entender (estudiantes y profesores de lenguas extranjeras incluidos).

Es decir, hablan del proceso de comunicación, y por tanto del proceso de enseñanza/aprendizaje.

Pongo aquí dos, pero en los comentarios podemos comentar otras. En «Minusvalía» hay, entre otras cosas, una descripción de lo que puede estar pasando por la cabeza de un estudiante de nivel inicial, como me señaló Victoria Castrillejo. En «Atención» (archivo de sonido abajo) hay más de lo mismo y una clara alusión a la estafa evaluadora.

    Para más canciones pop sobre educación, en NodosEle tenemos varias listas en bancamp

    UPDATE 05.11.2010: En «Es increíble» (segundo archivo abajo) me parece ver algo del síndrome del «profesor quemado» en relación con sus estudiantes, entre otras cosas.

R-learning. Los robots como profesores de inglés en Corea del Sur

Siempre me ha llamado la atención el programa de «r-learning» que se está implementando en Corea del Sur.

No tengo mucha idea del tema, pero lo cierto es que los robots empiezan a invadir las aulas de inglés en Corea.

Uno de los más populares es Engkey, un «English-language teaching robot» desarrollado por el Korea Institute of Science and Technology. Cada robot tiene detrás un profesor nativo, que es quien pone el rostro en la pantalla y guía la clase desde cualquier parte del mundo.

El programa se está expandiendo rápidamente y responde a varios factores, como la escasez de profesores nativos de inglés en Corea y el enorme desarrollo de la robótica en aquel país. Hay diferentes variedades de robots, entre ellas el perro Genibo, que participa en las clases de primaria; en realidad, la mayoría de los robots funcionan como asistentes del profesor.

Según las autoridades educativas coreanas «el robot educativo ayuda a aumentar el interés del alumno y la automotivación a la hora de estudiar una lengua, y mejora la competencia lingüistica de los escolares». Personalmente sigo estas experiencias, porque me despiertan gran curiosidad.

Leer en los tiempos del iPad/iPhone

La tecnología ha entrado definitivamente en las aulas. Mis estudiantes llevan sus iPads, portátiles o iPhones a clase, hacen fotos de la pizarra, graban lo que les interesa, buscan palabras, imágenes o información usando las apps e intercambian entre ellos y conmigo a través de navegadores smartphone.

La tecnología interna no nos sirve, porque la que usamos de verdad es la que traemos de la calle antes de encontrarnos en ese espacio común que hemos dado en llamar «aula». Aprendemos igual que vivimos.

En Suecia la lectura está cambiando. Esto afecta al proceso de aprendizaje de lenguas. Personalmente leo los libros de Martin Widmark en el iPad, con una interfaz que me hace mejorar mi sueco de un modo adictivo. ¿Existe algo así en español?

En el iPhone/iPad tengo montones de libros e historias con grandes interfaces, algunas gratuitas y otras de pago. Mis favoritas en este momento son Wolf Hall de Hillary Mantel, pero muy especialmente Alice in Wonderland de Lewis Carroll, una app de 52 páginas llena de imaginación y buen gusto, obra de Atomic Antelope:

En una entrada posterior escribiré sobre la descarga cognitiva que supone este cambio en la forma de lectura, daré alguna nota sobre los libros de Clay Shirky, un divulgador en la línea de Steven Johnson (que tanto nos gusta en NodosEle) y sobre antecedentes históricos del caos creativo en que vivimos, de Mozart a Borges.

No puedes tener 500 millones de amigos sin hacer algunos enemigos

El 1 de octubre se estrena «The Social Network. You don’t get to 500 million friends without making a few enemies» (tráiler abajo), la historia de cómo Mark Zuckerberg creó Facebook en 2004 siendo estudiante de la Universidad de Harvard. La ha dirigido David Fincher (recuerdo «Seven»), que no se ahorra los pasajes escabrosos relacionados con las drogas y el sexo, según vienen en el libro original. Las críticas que he visto la presentan como una película destinada a convertirse en símbolo de una época. Veremos.

Por otra parte, está en preparación la versión cinematográfica de «Googled. The End of the World As We Know It», el libro de Ken Auletta, que narra la historia de Brin y Page, los dos estudiantes de Stanford (uno llegado de la Unión Soviética y el otro hijo de un científico de la Nasa) que crearon el algoritmo de Google, una de esas tonterías que simplemente cambian el mundo.

En este caso, parece que la historia será más bien edificante: la lucha de dos genios para imponer sus reglas en el mundo de los negocios, el deseo de mantenerse duros y puros bajo el lema dickensiano de «don´t be evil» («no hagas el mal»); es decir, una historia de integridad y fe en el proyecto propio.

Sigue también adelante el documental sobre The Pirate Bay. ¿Para cuándo «Nodos Ele, la película»?

«Future of Education» y «Critical Literacies». Dos cursos sobre pedagogía y la red.

Mientras en España la tendencia sigue siendo mirarse en el ombligo 2.0, surgen en la red nuevos espacios donde aprender y debatir sobre el papel y el uso de la red en Educación. Destacamos ahora dos, comandados respectivamente por George Siemens y Stephen Downes:

  • El Open Course on Education Futures, organizado por Siemens en colaboración con Dave Cormier, pretende ser una reflexión sobre las vías que se han abierto en los últimos años en Educación. Además de retomar algunos de los principios que ya se trataron en CCK08 y CCK09, me parece especialmente relevante el hecho de que los contextos educativos de los participantes jueguen un papel decisivo en la reflexión, de manera que la estandarización de un paradigma normativo en educación pierde cada vez más sentido. También dedican un espacio importante a las tendencias sociales que influyen en el aprendizaje, de las que en Nodos_ELE llevamos tiempo hablando aquí y allá.
  • De otro lado, Stephen Downes se ha embarcado en Critical Literacies Online Course, un curso más centrado en demostrar que el aprendizaje online (e-learning) no sólo es posible, sino que ha ocurrido en alguna ocasión. El objetivo fundamental es destacar que el e-learning exige del desarrollo de determinadas competencias fundamentales para el nuevo mundo (electrónico y multimedia), y dilucidar cuáles son esas competencias.

Personalmente, si no tienes tiempo -como me pasa a mí- yo seguiría el curso de Siemens y Cormier, aunque si puedes, te aconsejo que eches un ojo a los dos.

Como yo lo veo, la aparición de estos cursos de manera simultánea y no complementaria, es la prueba de esa escisión conectivista de la que hablábamos ya hace tiempo. Ahora es el momento de poder decidir si estás con Siemens o con Downes…

La escuela de la ignorancia

Acuarela Libros reedita La escuela de la ignorancia de Jean-Claude Michéa, profesor de Filosofía en Montpellier.

Recuerdo el impacto que me causó este «libelo» en 2002, me influyó mucho porque la situación de Francia es perfectamente extrapolable a la de la mayoría de países europeos. Que haya necesidad de reeditarlo indica que sigue vigente y que cada vez más personas entienden la importancia de lo que está en juego.

De la edición de 2002 destacaría la reseña de Fernando Savater en El País -no encuentro el enlace. De la edición actual la de José Sánchez Tortosa en Libertad Digital. Michéa -liberal de izquierdas y experto en Orwell- resume en pocas palabras qué entiende por «universalización de la ignorancia»:

Cada pocos años, la clase política y sus expertos en «ciencias de la educación» acometen una nueva reforma de la Escuela. Sin embargo, el fracaso escolar sigue agravándose: la infantilización gana terreno a la inteligencia crítica; el individualismo y la negación del otro se apodera de las relaciones humanas; el dominio de la inmediatez corroe toda disciplina del tiempo o la atención.

Los actuales progresos de la ignorancia, lejos de ser el producto de una deplorable disfunción de nuestra sociedad, se han convertido en una condición necesaria para su propia expansión.

No tengo el libro a mano como para hacer una reseña más extensa, pero lo recomiendo por la lucidez de su análisis. Y si no se fían de mí, háganlo de Savater: “Lo bueno de los panfletos inteligentes es que dan una voz de alarma sugestiva incluso para quienes no comparten del todo los presupuestos del panfletario. Tal es el caso de esta obrita, escrita con la intensidad y el debido mal genio que cuadran al género».

Aprovecho para destacar la labor que viene haciendo Amador Fernández-Savater en Acuarela Libros, una editorial que procede del mundo del fanzine (como muchos de nosotros: hazlo con poco, hazlo tú mismo, copia y pásalo) y que forma parte de la nueva cultura editorial que encuentra su fuerza en la libertad, el sharismo y el copyleft.

Face to Face v. Facebook, un debate estéril… y Borges

A través de Facebook he conocido Face to Face. Un cortometraje sobre la desconexión (noviembre 2009), dirigido por el argentino Max Coronel. La tesis de la obra es clara: «las redes sociales como Facebook muchas veces nos desconectan de la realidad y nos alejan de las relaciones cara a cara«:

https://youtube.com/watch?v=l4sbmHrpTYs%26hl%3Des_ES%26fs%3D1%26

En mi opinión, se trata de una nueva versión de un argumento tan trillado como falso -el mito del «buen salvaje» en clave tecnofóbica. En este juego de interfaces en que se ha convertido nuestra vida -si es que alguna vez la vida no fue un manejo de interfaces-, plantear de este modo la dicotomía mundo real/mundo digital resulta pueril.

A este corto le pasa como a esas películas que están muy bien hasta que llegan los minutos finales con su pasteloso y obligatorio «happy end». Y eso que el valor de Face to Face radica precisamente en la forma en que relaciona las interfaces real y digital; en eso, este corto es una buena idea (aunque plana).

Otro argentino, Jorge Luis Borges -de quien últimamente se han publicado algunos libros de título atractivo y lectura decepcionante que lo consideran precursor de internet (está por escribirse el estudio que relacione en serio a Borges con la web 2.0)- refuta esta falsa controversia real/virtual en «Borges y yo».

Rasmus Fleischer – Manifiesto postdigital

manifestetRasmus Fleischer (Halmstad, 1978) ha lanzado esta semana un nuevo manifiesto que está teniendo cierto eco en los medios de comunicación suecos: Det postdigitala manifestet. Hur musik äger rum (Manifiesto postdigital. Cómo la música se abre paso. Ink Bokförlag). A mí me ha llegado la versión en papel, pero está descargable en varios formatos, y por supuesto en The Pirate Bay -eso sí, solo en sueco.

Fleischer es un agitador cultural muy inteligente que se mueve como pez en el agua en el campo de los estudios culturales en la era posdigital. Su blog Copyriot es una fuente de inspiración continua más allá de la nueva cultura musical, y algunas de las entradas las publica también en inglés.

Mi sueco es bastante precario aún, pero diría que Fleischer considera que los cambios en la industria musical marcan el camino a una nueva era posdigital, para la que propone algunas estrategias:

  • nuevo acercamiento crítico: la gente se fía más de una entrada en un blog que de un artículo de periódico; la figura del crítico (de música o de lo que sea, añado yo) o se adapta a las nuevas fuentes de autoridad, o desaparece
  • reflexionar más: en línea con la iniciativa de los No Music Days, propone una mayor reflexión sobre lo que está pasando, a través de pausas en el flujo que nos permitan desconectar para poder situarnos mejor en un panorama inédito, que toda la música de todos los tiempos está a un clic y podemos almacenarla en minísculos dispositivos portátiles.
  • nueva política cultural: los políticos no entienden nada si piensan que pueden parar el flujo o dictar qué es cultura y qué no lo es; el cierre del Café Edenborg es un ejemplo de estos errores, y está convirtiendo la Ciudad Vieja de Estocolmo en una zona turística sin personalidad
  • nueva economía postdigital: lo digital lleva a lo no digital. Estocolmo -y toda Suecia- se ha convertido en una explosión de conciertos, festivales de música y actividad cultural floreciente gracias a The Pirate Bay y la cultura del intercambio libre; ha nacido una nueva forma de economía en la que el «sharismo» da lugar a más música, más grupos y más conciertos, es decir, a más riqueza y variedad.

En mi opinión, desde el mundo educativo haremos bien en estar pendientes de los cambios en la industria cultural, porque Fleischer tiene razón al decir que de los cambios en música han abierto un nuevo panorama dentro de la sociedad digital. Cuanto antes caigan los muros en el terreno educativo, antes será posible entrar en una educación postdigital en la que el centro del aprendizaje radique en el individuo y su libertad, lo que aquí hemos llamado Edupop.

Yi Won: «Hago clic, luego existo»

3844061938_fe4731d760_mEn junio tuvo lugar en Rotterdam una nueva edición del Poetry International Festival, que pude seguir a través de la red. Una de las secciones de esta edición (y van 40) estaba dedicada a la «poesía digital», es decir, a la mezcla de arte y tecnología, sobre todo a través de lo que dieron en llamar Digital Poetry Laboratory.

De entre lo que pude ver destacaría, por ejemplo, las «works for I-phone» de la norteamericana Aya Karpinska, o este poema de la coreana Yi Won (Seúl, 1968), que traduzco del inglés como «Hago clic, luego existo», aunque el original está en coreano [aquí el vídeo] y tiene ya unos años, porque la autora lo escribió para el «Poetry International Festival Rotterdam» de 2004 -de entonces es la foto de arriba, en la que está con su hermana.

    HAGO CLIC LUEGO EXISTO (2004) – Yi Won
    [Traducción e hiperenlaces de Emilio Quintana]

    En vez de desplegar el periódico de la mañana fresco de tinta
    cuando me levanto hago suavemente doble clic en el aséptico internet
    Hago clic en el PDF gratuito que me muestra
    exactamente la imagen de una página impresa de periódico
    El KOSDAQ ya no tiene impulso
    Total de la deuda externa a corto plazo 50.000.000.000 de dólares
    Con cada clic se pasa una página del periódico
    Hago clic en el mundo sin parar
    Con un clic un mundo se colapsa y
    otro surge
    El sol se eleva También el sol tiene instalado un chip
    Le echo un ojo a un artículo de 12 páginas: “El ordenador detecta
    una conexión wifi en mi cuerpo en el que hay fibras ópticas que conducen
    electrodos microscópicos injertados en la red de nervios de mis brazos”
    y hago clic en la página web de Kevin Warwick que sueña con el primer
    robot humano Soy el visitante 28.412
    Tengo un gen que también quiero insertar
    Con el índice de mi mano derecha con el que muevo el ratón
    Hago clic en mi correo electrónico Por la noche me ha llegado un email
    Hago clic en el archivo adjunto que k desde Toronto me ha mandado
    Rosas rojas perladas de gotas de rocío que caen de los pétalos
    Florecen tras una valla blanca
    Las flores que me ha enviado k no están marchitas
    Inmediatamente hago clic en el dial del teléfono online gratuito
    Hago clic en el número de k
    Me conecto a 689 millas de distancia
    Incluso Yo puede que sea un programa que alguien ha instalado
    Moviendo el escurridizo ratón con la mano derecha Yo
    Hago clic en literatura Hago clic en revistas
    Hago clic en el número de abril del webzine literario Novel
    “El principito” en la cubierta dice: “Lo que hace bello al desierto
    es que en alguna parte esconde un pozo”
    continuamente cambia la escena en torno a él Abro la ventana un poco más y
    hago clic en la librería online Aladdin Le echo un ojo a la lista de novedades
    Hago clic para comprar La música del azar de Paul Auster con un 20% de descuento
    y La violencia y lo sagrado de René Girard con un 15%
    Afuera de mi ventana los asuntos rutinarios se dan de cabezadas
    dentro de un camión a un ritmo de 4-beats chunda chunda chunda chunda
    Me dejo llevar por el momento musical chunda 4-beat y
    mirando con displicencia hacia la calle el camión hace clic en su mapa
    Sigo una de las carreteras que salen de Seúl y conducen al
    Templo de Hwaôm El sonido de una campana de madera se expande desde los
    arrayanes de camelias
    delante del interior del templo Manos juntas que rezan
    Hago clic en uno de los cupones con 60% de descuento para un apartamento en las Montañas Chiri
    En mis rodillas bajo la impresora
    me cae un cupón como un pétalo de camelia Yo
    hago clic en el Yo adjunto en el pétalo de camelia
    Cero categorías y 177 páginas se abren
    resultado de la búsqueda de la palabra Yo
    Pero dónde soy
    Buscando Yo Yo hago clic en todas las páginas en orden
    locura película India y Yo…me escindo
    … saliendo… pleiteando sola…Y Yo, S.A. .…
    historias que quiero contar… la tierra y Yo….
    Puedo escuchar el clic de las pezuñas de un camello de dos jorobas

    Hay un oasis cerca
    Sigo Hago clic luego existo

Obviamente, la traducción es una pálida muestra del original.

    En Nodos Ele hemos dedicado otras entradas al tema de la poesía en la era digital. Y seguiremos haciéndolo